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Un sueño hecho realidad: Harry Potter y la piedra filosofal
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Noviembre 29, 2001 - 14:02
El éxito literario de J.K. Rowling llega, por fin, a la pantalla grande. Un film grandilocuente que no mata la imaginación
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| Harry Potter y la piedra filosofal |
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Todo lo que te imaginaste sobre Harry Potter y sus mundos muggles y mágicos se convirtió en realidad... al menos desde la pantalla grande.
Es que la película de la Warner, que sacó del papel la historia creada por J.K. Rowling, cumple, con justicia, con todas las fantasías (y fanatismos) generados en torno a la figura del personaje Harry Potter.
Chris Colombus, el director, le había hecho una promesa a la autora de la saga literaria (que colocó más de 100 millones de ejemplares en 46 idiomas diferentes): “Ser fidedigno a su visión”. Y lo cumplió no sólo en la imagen de los personajes, los escenarios y los detalles de la historia, sino también en los diálogos. Un ejemplo claro se observa cuando Draco Malfoy (el aspirante a mago que formará parte de la casa Slytherin, y bien cercano al lado oscuro) se presenta ante el famoso Harry Potter y su, por entonces, casi amigo Ron Weasley: “No hay dudas de quién eres: pelirrojo y con ropa usada... eres un Weasley”.
Lo cierto es que el film puede causar efectos bien diferentes en los distintos tipos de espectadores: los que nunca leyeron los libros de Harry Potter y llegan al cine para descubrir su magia, los que leyeron sólo el primer libro (“Harry Potter y la piedra filosofal”) y los que devoraron las cuatro historias existentes al momento (la primera, que corresponde al film, “Harry Potter y la Cámara Secreta”, “Harry Potter y el prisionero de Azkaban” y “Harry Potter y el cáliz de fuego”).
Para los primeros, todo será sorpresa y emoción. Para los segundos, probablemente lo imaginado se materializará (y correrán a leer los tomos restantes y se sentarán a esperar las próximas películas)... pero para los terceros, aunque no habrá lugar para arrepentimientos, nada será inesperado... seguramente pensarán que mejor suerte hubieran tenido si la película en cartel fuera la correspondiente al cuarto libro y no al primero.
Y es lógico... después de leer cientos y cientos de páginas y de saber qué pasa con el mago “innombrable” a lo largo de cuatro años, de conocer cómo evoluciona la amistad de Ron, Hermione y Harry, de saber cuáles son los puntos débiles de Hogwarts (la escuela de magia), de confirmar quienes son los “malos” y quienes los “buenos”, de sorprenderse con más y más criaturas mágicas, de destapar más secretos sobre el escalofriante Snape, de confirmar que Potter no está tan solo en el mundo... desandar nuevamente los orígenes de esta historia tan hecha “carne” para el lector puede resultar un poco desalentador.
(Inserción pagada: cinepolis.com)
Por Intelmax.com
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